Rev. chil. endocrinol. diabetes 2017; 10 (1)    Volver a Índice

 

Editorial

Rumbo a los 60 años de la Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes

Dra. Carmen Gloria Aylwin
Presidente SOCHED

Próximos a cumplir los 60 años desde la fundación de la Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes, se presenta una excelente oportunidad para detenerse a reflexionar y analizar cuáles han sido sus aportes y qué desafíos tenemos pendientes a futuro.

Mirar hacia atrás es situarse en el año 1958, cuando un pequeño grupo de destacados endocrinólogos, que se reunían regularmente para compartir sus experiencias, sintieron que debían formar una instancia de participación superior. La iniciativa partió de la necesidad de crecer en el conocimiento de la especialidad, de interactuar con especialistas básicos y clínicos afines, de fomentar el desarrollo de la investigación, de acoger a quienes estuvieran interesados en el estudio y tratamiento de las patologías endocrinas y de impulsar el avance de la disciplina en el país. Todo esto se concretó con la fundación de la Sociedad Chilena de Endocrinología.

Era la época del “auge hormonal” y en Chile ya había endocrinólogos destacados en la clínica, en el laboratorio de la especialidad y en la investigación, aportando diversas iniciativas, algunas de ellas con impacto en las políticas públicas, como fue la yodación obligatoria de la sal para frenar la alta prevalencia de bocio endémico que existía en el país.

Asimismo, se iniciaba un gran desarrollo en el campo de la Diabetología, uniendo a endocrinólogos y diabetólogos bajo un mismo alero, el que años después se oficializaría formalmente con el cambio de nombre a Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes (SOCHED).

La Sociedad fue creciendo en el número de sus miembros provenientes del mundo académico, clínico, de las ciencias básicas y del laboratorio, convirtiéndose en la principal instancia de encuentro e intercambio entre quienes ejercían la especialidad. Contribuyó a cultivar el conocimiento en las distintas disciplinas con actividades científicas de perfeccionamiento para los especialistas, apoyo para la formación de nuevos endocrinólogos y diabetólogos, estímulo a la capacitación con becas de estadías en el extranjero para sus socios y auspicio con fondos específicos para investigación, jugando así un rol esencial en el desarrollo de la endocrinología y diabetología del país.

En forma paralela se han desarrollado múltiples actividades de extensión para entregar a los profesionales no especialistas del equipo de salud los conocimientos necesarios para la adecuada detección, diagnóstico y tratamiento a nivel primario de patologías endocrinas. Asimismo la SOCHED, a través de sus miembros, ha tenido un importante rol en el apoyo a la salud pública, aportando con sus conocimientos en la elaboración de múltiples protocolos y guías clínicas de patologías que nos competen, llegando a ser el principal refere nte en los asuntos de nuestra especialidad.

A los 50 años de su fundación se lanza el primer número de la Revista Chilena de Endocrinología y Diabetes como Órgano Oficial de la SOCHED, un hito importante en la vida societaria. La revista constituye un gran avance y llena un vacío al no contarse hasta esa fecha con un instrumento de información científica propia, reemplazando al boletín “Endocrinoticias” que por muchos años fue una fuente de comunicación y discusión para los socios. Sin embargo, se hacía necesaria una herramienta de difusión que cumpliera con toda la rigurosidad de una publicación científica y contar así con otro instrumento para la formación y actualización de los especialistas a través de la publicación de casos clínicos, revisiones de expertos y estudios de investigación básica y clínica.

En los últimos años, y sin descuidar nuestra misión de “integrar a los profesionales interesados en la endocrinología y la diabetes con el fin de desarrollar y difundir la disciplina en Chile, con excelencia y contenido ético, para beneficio de la población”, se ha dado un importante impulso a la modernización de la Sociedad, incorporando adelantos tecnológicos, vínculos con los medios de comunicación y redes sociales que no sólo apoyan la integración y participación de los socios a lo largo del país, sino que nos ha llevado a se r hoy día una institución eficiente, organizada y moderna.

Esto nos ha permitido ampliar nuestra presencia en la comunidad, hacerlo extensivo para la población general y ser un referente para nuestros pacientes, condición que hasta hace poc o tiempo sentíamos deficitaria. No hay duda, que desde que se fundó la Sociedad, la endocrinología y la diabetología han tenido un gran avance.

Ambas disciplinas se han expandido. La endocrinología se ha dividido en varias subespecialidades que propician una rica actividad académica y de investigación, reflejando los distintos intereses que hay entre sus miembros. Al igual que las grandes sociedades internacionales debemos acoger y canalizar las diferentes inquietudes que son signos de madurez y crecimiento de nuestra institución, de nuestra especialidad y de nuestros especialistas. Así, recientemente nacen en el seno de nuestra sociedad los grupos de estudio SOCHED, que permiten profundizar en las distintas áreas de conocimiento, con el compromiso de dar frutos en investigación, estudios colaborativos, aportes a nuestras actividades académicas, consensos y pronunciamientos en el tema que los ocupa.

Algo similar sucede en diabetes. El desarrollo de nuevas tecnologías, de la diabetología pediátrica y geriátrica y las diferentes complicaciones de la enfermedad, han llevado a focalizar los intereses hacia uno u otro ámbito de la especialidad, lo que también requiere aunar criterios y elaborar conse nsos que sean un referente SOCHED.

Ciertamente todo este desarrollo es producto de la gran calidad y compromiso de sus socios, de la entrega de sus directorios, de contar con miembros que se han destacado por su investigación en Chile y en el extranjero, con académicos que han llegado a los más altos reconocimientos nacionales e internacionales, con clínicos que día a día entregan lo mejor para sus pacientes, con especialistas multidisciplinarios que nos enriquecen y nos permite el necesario desarrollo integral.

Nuestra Sociedad también se ha preocupado del reconocimiento de la especialidad, de participar con representantes en la más amplia gama de instituciones académicas, organismos de acreditación universitaria y de especialistas, de establecer vínculos con sociedades científicas nacionales e internacionales y de apoyar a las autoridades responsables de tomar decisiones en materias sanitarias entregándoles una op inión basada en evidencia.

Debemos sentirnos orgullosos de pertenecer a una sociedad científica que ha realizado tantos aportes, que está plenamente consolidada y que es un referente en la endocrinología y diabetes en el páis.

Los principios inspiradores de quienes la fundaron no sólo se mantienen vigentes sino que, a través de los años, se han ido fortaleciendo. Nuestra misión es seguir creciendo en número de socios, continuar aportando al país con nuestros
conocimientos, seguir apoyando el perfeccionamiento de sus miembros e impulsar su desarrollo en las distintas áreas de interés. El crecer juntos nos fortalece y nos permite perfeccionar nuestro quehacer.

Un especial desafío a lograr al cumplir 60 años es que nuestra revista científica esté indexada. Ése es un trabajo y una responsabilidad de todos. Hago un llamado no sólo al mundo académico, sino también a la comunidad profesional en general, a que comuniquen sus experiencias e intereses en nuestra revista para difundir los conocimientos generados
en el país, lo que contribuirá a un mejor conocimiento de nuestra realidad, de nuestros problemas y a la actualización permanente de los diferentes profesionales que se desempeñan en el campo de la endocrinología y diabetes.

SOCHED ha crecido vinculada al desarrollo de la especialidad y del país, sin embargo, hoy día los cambios se producen con gran velocidad por lo que debemos adaptarnos a las exigencias del progreso y del conocimiento. Tenemos mejores y más sofisticados medios para difundir la información, pero no debemos olvidar que nada reemplaza la riqueza del intercambio, del trabajo conjunto y de la comunicación personal. Nuestra principal fortaleza ha sido y deberá seguir siendo el espíritu de unidad y camaradería de sus socios, la excelencia científica, la difusión de nuestra investigación y conocimientos bajo el alero de nuestra sociedad y a través de ella servir al país. Es con ese espíritu que los invito a seguir creciendo y avanzando rumbo a los 60 años de nuestra querida Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes.lógicos, vínculos con los medios de comunicación y redes sociales que no sólo apoyan la integración y participación de los socios a lo largo del país, sino que nos ha llevado a se r hoy día una institución eficiente, organizada y moderna.

Esto nos ha permitido ampliar nuestra presencia en la comunidad, hacerlo extensivo para la población general y ser un referente para nuestros pacientes, condición que hasta hace poc o tiempo sentíamos deficitaria.

No hay duda, que desde que se fundó la Sociedad, la endocrinología y la diabetología han tenido un gran avance. Ambas disciplinas se han expandido. La endocrinología se ha dividido en varias subespecialidades que propician una rica actividad académica y de investigación, reflejando los distintos intereses que hay entre sus miembros. Al igual que las grandes sociedades internacionales debemos acoger y canalizar las diferentes inquietudes que son signos de madurez y crecimiento de nuestra institución, de nuestra especialidad y de nuestros especialistas. Así, recientemente nacen en el seno de nuestra sociedad los grupos de estudio SOCHED, que permiten profundizar en las distintas áreas de conocimiento, con el compromiso de dar frutos en investigación, estudios colaborativos, aportes a nuestras actividades académicas, consensos y pronunciamientos en el tema que los ocupa.

Algo similar sucede en diabetes. El desarrollo de nuevas tecnologías, de la diabetología pediátrica y geriátrica y las diferentes complicaciones de la enfermedad, han llevado a focalizar los intereses hacia uno u otro ámbito de la especialidad, lo que también requiere aunar criterios y elaborar conse nsos que sean un referente SOCHED. Ciertamente todo este desarrollo es producto de la gran calidad y compromiso de sus socios, de la entrega de sus directorios, de contar con miembros que se han destacado por su investigación en Chile y en el extranjero, con académicos que han llegado a los más altos reconocimientos nacionales e internacionales, con clínicos que día a día entregan lo mejor para sus pacientes, con especialistas multidisciplinarios que nos enriquecen y nos permite el necesario desarrollo integral.
Nuestra Sociedad también se ha preocupado del reconocimiento de la especialidad, de participar con representantes en la más amplia gama de instituciones académicas, organismos de acreditación universitaria y de especialistas, de establecer vínculos con sociedades científicas nacionales e internacionales y de apoyar a las autoridades responsables de tomar decisiones en materias sanitarias entregándoles una op inión basada en evidencia.

Debemos sentirnos orgullosos de pertenecer a una sociedad científica que ha realizado tantos aportes, que está plenamente consolidada y que es un referente en la endocrinología y diabetes en el páis.

Los principios inspiradores de quienes la fundaron no sólo se mantienen vigentes sino que, a través de los años, se han ido fortaleciendo. Nuestra misión es seguir creciendo en número de socios, continuar aportando al país con nuestros conocimientos, seguir apoyando el perfeccionamiento de sus miembros e impulsar su desarrollo en las distintas áreas de interés. El crecer juntos nos fortalece y nos permite perfeccionar nuestro quehacer.

Un especial desafío a lograr al cumplir 60 años es que nuestra revista científica esté indexada. Ése es un trabajo y una responsabilidad de todos. Hago un llamado no sólo al mundo académico, sino también a la comunidad profesional en general, a que comuniquen sus experiencias e intereses en nuestra revista para difundir los conocimientos generados
en el país, lo que contribuirá a un mejor conocimiento de nuestra realidad, de nuestros problemas y a la actualización permanente de los diferentes profesionales que se desempeñan en el campo de la endocrinología y diabetes.

SOCHED ha crecido vinculada al desarrollo de la especialidad y del país, sin embargo, hoy día los cambios se producen con gran velocidad por lo que debemos adaptarnos a las exigencias del progreso y del conocimiento. Tenemos mejores y más sofisticados medios para difundir la información, pero no debemos olvidar que nada reemplaza la riqueza del intercambio, del trabajo conjunto y de la comunicación personal. Nuestra principal fortaleza ha sido y deberá seguir siendo el espíritu de unidad y camaradería de sus socios, la excelencia científica, la difusión de nuestra investigación y conocimientos bajo el alero de nuestra sociedad y a través de ella servir al país. Es con ese espíritu que los invito a seguir creciendo y avanzando rumbo a los 60 años de nuestra querida Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes.